Las texturas del deseo y la satisfacción


1.Todo es un balance entre el deseo y la satisfacción.

Y lo más memorable no es ni el deseo, ni la satisfacción si no lo que pasa entre esta dos cosas, o sea lo de en medio. Puedes provocar o controlar el deseo y a final de cuentas, lograr (o no) la satisfacción, pero hay que recordar que los humanos tenemos una mente a traves de la cuál interpretamos lo que pasa por nuestros 5 sentidos, y esta es la que provoca el deseo y siente una satisfacción a travé de estos sentidos. Dos fuerzas bién poderosas por las que nos regimos los humanos, por esto...

2.Taste is entirely subjective, texture is not.
( El sabor es enteramente subjetivo, pero la textura no lo és)

La percepción de el sabor (clave en la satisfacción del deseo) gira en torno a nuestra interpretación de él, sobre todo un ¨antes y después¨ gustativo, o digamos que el ¨archivo de sabores¨y experiencias de quien percibe el sabor y demás cosas atadas psicológicamente al fenómeno de la percepción, como memorias y demás. En cambio, hay algo inmovible; La textura. Es algo que verdaderamente no tiene lugar a dudas ni interpretaciones muy variadas. És o no es. Sedoso o rugoso, cremoso ó plano. La textura es inconfundible porque es una sensación física , como el frío y el caliente y por eso es un puente bien fuerte entre el deseo, y la satisfacción.



Manejar bien estos conceptos puede convertirlos en unas herramienta muy útiles, más allá del umbral culinario.